Cada vez que arrendamos o compramos una propiedad debemos tener claridad sobre un aspecto fundamental que impactará directamente en nuestro bolsillo: Los gastos comunes.
Los gastos comunes son todos aquellos que genera un edificio o condominio para administrar, mantener y reparar los bienes de dominio común. Existen en todo tipo de comunidad, ya sean casas, departamentos, bodegas u oficinas.
¿Cuáles son los gastos comunes de una propiedad?
Gastos comunes ordinarios
Son los de la administración, destinados para pagar remuneraciones de personal de aseo, seguridad, conserjería y jardin. También para generar nuevas obras comunes, reparaciones y financiar mantenciones.
No todos los gastos son fijos, pues están los cargos por uso y consumo de servicios, como lo pueden ser el gas para la calefacción central el cual dependerá del consumo en el que haya incurrido individualmente cada hogar.
Gastos comunes extraordinarios
Estos gastos no pertenecen a instalaciones ya existentes sino a reformas o nuevos proyectos que el edificio o condominio decida llevar a cabo. Deben ser de uso público, como por ejemplo, cambiar la decoración de un espacio común, la instalación de juegos y columpios para niños o la construcción de una piscina o un quincho.
¿Quién es responsable de pagar los gastos comunes?
Para los clientes de Tango Rent, cuando se publica la propiedad, se puede optar a que el valor del arriendo incluya los gastos comunes. Si el propietario se decide por esa opción, eso queda en el contrato. En ese caso el arrendatario/o solo pagaría el arriendo y el propietario se encargaría de pagar los servicios mensualmente.
Ahora bien, si el dueño opta por NO incluir gastos comunes en el valor del arriendo (y por ende, en el contrato), queda bajo responsabilidad del arrendatario/a pagar esa cuenta todos los meses.
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¿Y que pasa con los seguros de una propiedad?
La ley obliga a los administradores de los condominios a contratar un seguro de incendio que proteja las zonas comunes. Esta prima le corresponde al propietario del inmueble. Sin embargo, como se trata de un monto mínimo que se cobra mediante la factura de gastos comunes, suelen ser los arrendatarios los que terminan pagándola. Para evitar esto, hay que lograr un acuerdo con el propietario desde el primer momento para tener claridad al respecto.
Lo mismo ocurre con el fondo de reserva, el cual está especialmente destinado a atender a las reparaciones de los bienes de uso común y los gastos comunes imprevistos o urgentes, por lo que también debe ser pagado por el propietario, así como el seguro de incendio.
Si tienes más dudas sobre temas de arriendo de propiedad, puedes consultar en nuestro Centro de Ayuda Tango Rent, donde podrás tener más información al respecto.